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La inteligencia artificial, por medio del procesamiento de datos, brinda soluciones que simplifican las actividades diarias de las personas.

El concepto de la inteligencia artificial (IA) parece ser algo muy avanzado y aún lejano, pues hoy en día vemos películas de ciencia ficción con robots que cuentan con características similares a las de los seres humanos. No obstante, aunque algunos lo desconocen, esta solución tecnológica se encuentra presente en muchas actividades cotidianas. En términos generales, la IA hace referencia a la habilidad que tienen los sistemas o máquinas de realizar tareas complejas a través de la abstracción y el procesamiento de datos. 

En la actualidad, esta tecnología se encuentra presente en los dispositivos autónomos, juegos, buscadores, aplicaciones e incluso en el ámbito de la educación. Por lo tanto, la IA es una de las tecnologías con mayor proyección de crecimiento económico. De acuerdo con datos de Statista, el valor de la inteligencia artificial podría superar los USD 100,000 millones para el 2025. 

Actividades cotidianas como realizar búsquedas en la red se han podido perfeccionar gracias a la implementación de la IA, la cual analiza el lenguaje para poder ofrecer resultados más precisos a las consultas de los usuarios. Asimismo, esta herramienta digital influye en las sugerencias y notificaciones que se muestran en las redes sociales, pues examina las preferencias de las personas para presentarles contenido de su interés.

La inteligencia artificial también ha facilitado el desplazamiento de un sitio a otro, ya que por medio de las aplicaciones de navegación los conductores están informados, en tiempo real, del estado del tránsito y se les proponen rutas más eficientes a seguir. Además, hoy en día es muy común encontrar autos con sistemas de aparcamiento asistido y cada vez son más accesibles los vehículos autónomos. Estas soluciones disminuyen los atrasos y los inconvenientes que los automovilistas pueden encontrar en su camino.

En el ámbito de la educación, esta tecnología no solo facilita el trabajo de los docentes, sino que también personaliza los contenidos, para simplificar el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Por medio de distintos programas, los profesores pueden calificar las tareas e identificar los errores más comunes de los alumnos; de igual manera, pueden detectar plagio en los informes.

Sin duda, la inteligencia artificial no es algo del futuro, pues ya se encuentra presente en distintas formas y actividades de la vida diaria. Esta solución tecnológica se ha convertido en un gran apoyo para las personas porque brinda soluciones, reduce los errores y simplifica los procesos y las experiencias de los usuarios. Imaginan, ¿cómo serían los días sin estas facilidades?

La inteligencia artificial ya se encuentra presente en distintas formas y actividades de la vida diaria.